4/1/10

Tempus Fugit

Escribo estas líneas con tierra en las uñas, puesto que hoy he desenterrado algo que hace tiempo metí en un hoyo en el patio de mi casa.

Cuando el Sátrapa contaba con 9 o 10 añitos supo de la existencia de las cápsulas del tiempo, y decidió hacer una. Cogió una caja de zapatos, puso fotos, un periódico, diversos objetos y una carta dirigida a su yo del futuro. Luego la envolvió con tres bolsas de plástico confiando en que protegerían el invento de la intemperie, y lo sepultó bajo tierra.

El sobre donde iba el mapa (absoluta y desesperantemente impreciso, como solo puede serlo un mapa dibujado por un niño) y en el que había la inscripción "No abrir hasta el año 2010" estuvo todos estos años guardado en un jarrón de mi casa, poniéndose amarillo pero perseverando. De vez en cuando le echaba un vistazo, para cerciorarme de que esa parte de mi infancia seguía existiendo.


Hoy por fin, cuando el tiempo me lo ha permitido, solo y con un pico y una pala, he cavado en el sitio exacto, ya que me acuerdo como si fuese ayer. Mi sorpresa ha sido mayúscula al ir desenterrando trozos de plástico, y al fin el corazón me ha hecho un vuelco al volver a ver el envoltorio de mi cápsula del tiempo. Pero solo era eso: un envoltorio. Puesto que lo demás ha quedado todo reducido a una especie de abono negruzco. Supongo que ya no queda nada de la memoria de mi yo pasado. En fin. Que inocentes somos de peques cuando pensamos que una caja de cartón va a estarse 16 años bajo tierra como si tal cosa.



¿Qué hacer a continuación? El tiempo lo dirá...

S.

1 comentario:

unscathed dijo...

...i love time capsules. Better luck with iron the next time! ;)