20/7/09

¡Make some f+++++g noise, Barcelona!

Saludos otro día más de esta semana especial de la Guarida del Sátrapa.
Hay pocas cosas que me gusten del verano, pero todas ellas son alucinantes. Por ejemplo la increíble disponibilidad de tiempo, sumada a las actividades que se suelen organizar cuando el calor aprieta.

Una de ellas sucedió hace dos semanas en Barcelona, y fue un día espectacular musicalmente hablando. Me refiero claro está al festival de heavy metal Sonisphere.
En el superespacioso, confortable yyyy sonoramente insuperable recinto del Forum acudieron un total de nueve respetadas bandas que aumentaron el nivel de decibelios de la ciudad condal.

Allí que nos fuimos de buena mañana mi compadre Quimera y yo, para reunirnos con Eva, Tere y Jordi. Ha sido el único festival en el que nadie me ha cacheado, ni siquiera la mochila, y eso que esta vez SI que llevaba un objeto contundente dentro. Me refiero señoras y señores a mi flamante Cuerno Cervecero (ya os contaré de donde salió este increíble objeto en el próximo post).
He de decir que Barcelona no ha destacado nunca por acoger grandes eventos metaleros, pero en su defensa hay que destacar la buena organización que reinó en el recinto. El primer grupo, The Eyes, una gente española la mar de maja que berrea un death metal bastante decente, empezó a la hora prevista y supieron caldear el ambiente (el cantante parece que es amiguete de toda la vida).

Luego llegó el turno para Gojira, los franceses que habían estado en el kobeta. ¿Que pasa con este grupo? Todo el mundo alucina con él...
Las cervezas habían empezado a correr, y al fin pudimos reunirnos el quinteto de siempre, justo a tiempo de ver que tal se las arreglaban los SA. Me duele no saberme las letras de sus canciones, prometo empollar para la próxima vez (que la habrá, palabra de honor).

¿Se ha notado mi tono sintético XD ? Eso es porque para mí la caña de verdad empezaba a partir de entonces, con la actuación de Mastodon. Pude conocer a los compañeros heavys de la clase del Jordi, ¡y constatar que ellos conocían algunas de mis correrías! ¿Como llegaron a saber que la víctima del incidente del brindis de la litrona era yo?
Mastodon sufrió muy a mi pesar de un sonido horrendo, hecho que se repitió a intervalos en otros grupos. Y el hecho lo descubrí más tarde: Los escenarios estaban 1- mal encarados y 2- demasiado bajos con respecto al público. Con lo cual si bajabas la cabeza no podías oír una m****a.

Secándome la lagrimilla me fui a ver que tal era un directo de Lamb of God. Creo que fue allí cuando perdimos de vista a Jordi. LOG son absolutamente apabullantes, realmente el primer trallazo del día. Pero lo mejor venía después.

Down, una banda que tiene un estilo muy heterogéneo, y que cuenta con unos de los mejores músicos de los 90s, por algo está calificada de superbanda. Tenemos a Phil Anselmo y Rex Brown, ex-pantera los dos, y con eso lo digo todo ¿o no? Pues bien, el maldito Anselmo es un showman de tomo y lomo, que no para de hacer cosas, desde cabriolas hasta alguna conversación con alguien del público. Me dejaron buen sabor de boca.

Y con esto llegamos al tripack final, que se celebró en el escenario grande: Machine Head, Slipknot y... Metallica.
¿Recordáis mi vivencia con Machine Head en el kobeta? Esta vez los vi desde la lejanía, comprobando que seguían en forma (el cantante sigue bebiendo a la voz de "salute men salut!").
Aquí es cuando yo me dije: o vas ya mismo para delante y aguantas Slipknot para ver bien a los mochachos de L.A. o te alejas lo suficiente de ese escenario enterrado bajo tierra como para escucharlo todo bien. Me decidí por la segunda opción, y menos mal porque la gente se volvió histérica. No era para menos, Slipknot es capaz de ofrecer un espectáculo único e irrepetible en cada directo. Y ver a nada menos que nueve tíos con máscaras rollo Saw danzando como monos por el escenario es algo que no se ve cada día.

Hasta aquí un día de festival guapo de verdad. ¿Como? ¿que aun queda Metallica? Pues sí hijos míos, y aquello fue de orgasmo. Las tocaron todas, salvo la ausencia de un Whiskey in the Jar que sustituyeron por la versión del Stone Cold Crazy de Queen (hubiese quedado bien, ya que por aquí nos quedamos sin ver a Thin Lizzy hace ya casi un mes...) Pero en definitiva, un conciertazo de órdago. Y ahí si que me quedé sin cuerdas bocales...

Más mañana. Cuidaos colegas...

S.


yeeeeeahh

1 comentario:

calcetinrayado dijo...

Gran crónica! Seguro que valió la pena y más! Jejeje

Saludos!