
Hola de nuevo, mis drugos.
El post de esta semana va dirigido a todos aquellos que necesiten una ayudita, o simplemente consejillos útiles en el difícil arte de seducir a la pareja, siendo el amante ideal (o acercándose ni que sea un poco).
Que no se preocupe el sector femenino, que también le va a tocar su turno en breves. Pero hoy no, hoy lo que toca es una clase teórica de cómo hacer un cunnilingus en condiciones.
Os voy a dar la lección en dos fases: primero la de los preliminares y luego la de la acción propiamente dicha.
Bien, empezemos.
En primer lugar, no es que os hable la voz de la experiencia, ni siquiera por el hecho de que sea un estudiante de letras (ser lingüista es lo que tiene, eres más suelto de lengua), pero mi escasa experiencia personal ha dado muy buenos resultados siguiendo estos sencillos pasos. Y también debo confesar que saber hacer un cunnilingus sube muchos puntos, en especial porque, según mis fuentes, muy pocos tíos son dados a ello y la mayoría lo hacen fatal.
En segundo lugar, he de deciros que si vais a intentar hacer esto lo mejor posible, debéis tener en cuenta dos cosas: no se valen los típicos tópicos de que “ug, que va a oler mal” o “ug, que no voy a poder saber si lo hago bien o mal hasta que la cague y me digan que pare”, y algo muy pero que muy importante: debe gustaros lo que hacéis. Si lo que haces no te produce placer, no lograrás transmitir eso a la persona interesada.
No temáis, si en un principio sois reacios con ese olor especial que tienen ciertas partes del cuerpo, podéis acordar con vuestra pareja de ducharos antes. Bien, hecho esto presupondremos que vuestra pareja y tú ya estáis con el termómetro subido. Vamos que la temperatura de la habitación ha subido por momentos. Es el momento de atacar. ¡Pero ojo! No nos iremos directamente al meollo del asunto. Empezaremos por mirarla, decirle qué es lo que os gusta de ella, besarla, acariciarla, e ir bajando paulatinamente. Las mujeres suelen excitarse mucho más con el lenguaje que con otra cosa. Con las palabras precisas lograréis un mejor orgasmo que con los gesto precisos, os lo digo yo. ^ ^
Sobretodo hay que retrasar el momento del ataque en sí, dejando signos evidentes de que efectivamente va a llegar, solo que ella no tenga manera de saber cuando exactamente. Al llegar entre sus piernas, podéis deteneros y mirar al horizonte. Es muy importante que antes de empezar observemos si la cosa está húmeda, que en el 90% de los casos sí que lo va a estar (si has seguido estas recomendaciones claro). Si no es así, podemos hacer muchas cosas para que eso cambie, entre ellas chuparos los dedos de la mano, e incluso con los propios jugos vaginales, y empezar a masajear delicadamente.
Luego apartaremos los labios externos suavemente para observar los internos, los cuales podemos empezar a chupar si se tercia, mientras buscamos en la parte superior hasta encontrar el clítoris.
En fin, hasta aquí los preliminares. Espero que os haya servido de algo. La semana que viene más, con el trato del clítoris y el cunnilingus propiamente dicho.
Cuidaos y disfrutad ;)
S.
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